La exposición Malkovich, Malkovich, Malkovich: Homenaje a los maestros de la fotografía, que podemos disfrutar en el Museo de San Telmo de San Sebastián lleva ya un largo recorrido a sus espaldas. Ahora tenemos la suerte de disfrutarla en Donosti hasta el 17 de noviembre de 2019. El fotógrafo Sandro Miller ha querido homenajear a los fotógrafos que le han influido en su carrera. Las imágenes son técnicamente perfectas, unas «copias» increíbles. Pero lo que de verdad me ha marcado es la personalidad camaleónica de John Malcovich. En alguna de las fotografías le reconocemos sin lugar a dudas pero otras hay que mirarlas y remirarlas para encontrarle. Porque se mete en la piel del personaje, encarna el espíritu de la obra original sin dar paso a su ego. No le importa desnudarse, reírse de él mismo, o «entrar» en otra persona.
El actor y el fotógrafo son amigos y han colaborado en otras ocasiones como en «Fuga Psicógena». La idea inicial de este proyecto era hacer cincuenta fotografías homenaje a los grandes fotógrafos pero cada una de ellas necesita de una gran preparación, así que sólo existen 41 imágenes. Este trabajo no está cerrado ya que Sandro Miller un principio va ha tomar las 9 imágenes que faltan. Hagamos apuestas por ver cuales son las que faltan en su imaginario personal. ¿Tal vez un autorretrato de Vivian Maier? Yo veo muy bien a Malcovich como la imagen de Colette de Irving Penn o La mujer joven con tabaco en la lengua del mismo autor. Hago un poco de trampa porque ya tiene unas cuantas imágenes versionadas de este autor.